Fuente: La Gaceta de Salamanca 2012-01-01

Este año toca tener la despensa a rebosar, llenita la nevera, por si las cosas vienen mal dadas y desde Alemania nos dicen que es preciso recortar hasta el buche. En previsión de tiempos peores, en recuerdo de otros donde los mercados sólo existían en la plaza del pueblo, la Asociación Cultural ´El Rejal´, de Bañobárez, organizó la sexta edición de su matanza tradicional para dar buena cuenta de un lustroso y apetecible marrano con 135 kilos de tocino, criadillas y jamón.

Comenzó de buena mañana Carlos Agudo afilando todo su instrumental. Demostrando su buen arte en estas lides, que ya son varios años en que le toca desmenuzar la carne del cerdo, fue apartándole al bicho todas las entretelas. Con la ayuda de los otros matanceros de Bañobárez, con la perra ´Mori´ a la espera de que le cayera algún cacho de sobras, iba apareciendo gustosa la carne del cochino mientras decenas de vecinos se esmeraban en preparar sus paladares para la comida que vendría después.

Unos cuantos niños rondaban también entre el humo y las gotas de sangre que delataban el lugar de la matanza, indicio de que aún habrá tradición por muchos años en el pueblo. Muchos observaban con admiración la diestra mano de Amador, uno de los matarifes más expertos de la localidad, mientras descarnaba con tiento las piezas del cebón. Y así, entre recorte y tajada, deparó el cambio de año buen alimento para todos los de Bañobárez.