Fuente: Lasarribesaldia.es 2013-01-10

Desde Cipérez a La Fregeneda, pasando por Villavieja de Yeltes, Yecla, Sobradillo y Vilvestre, todos están listos para celebrar la próxima semana distintos actos en honor a San Sebastián, hogueras incluidas, como es tradicional la noche antes de la onomástica del Mártir en Sobradillo y, al día siguiente, en La Fregeneda.

Los actos religiosos y misas se suceden con procesiones del Santo a hombros por las calles, como la que suele ser habitual esa noche previa en Sobradillo, lugar donde los mayordomos presiden el recorrido desde la ermita en advocación al Mártir hasta la iglesia parroquial de Santiago Apóstol, y donde el humo de las hogueras de ´jumbrio´ (enebro) embriagan de aroma a campo las vetustas fachadas de este pueblo resurgido del Medievo

Aquí es tradición en la noche, con el Santo una vez en la iglesia, celebrar con asados de carne y embutidos la llegada del Mártir al pueblo, como también los es en el municipio vecino de La Fregeneda al día siguiente, es decir, el 20 de enero, fecha en la que caída la noche se celebra la misa y la correspondiente procesión por las calles del pueblo, aromatizadas por el humo de las hogueras de enebro, un fetiche de antaño para evitar males y curar las matanzas recién colgadas en las cocinas.

También en Vilvestre sus vecinos se rinden en este día a San Sebastián. Aquí, como en Cipérez, nada menos que dos veces al año, pues el aquí Patrón no se queda sin su particular recuerdo en las fiestas de verano.

En todos estos lugares hubo sus cofradías de exaltación a la figura de San Sebastián, casi todas vigentes aunque con escasa actividad si las comparamos con las de Villavieja o Yecla, ambos con el ´apellido´ Yeltes en honor al río que surca sus tierras. Como en casi todos los lugares donde surgen cofrades, su vestimenta les delata con sus tradicionales capas negras, y en Villavieja, además, con tocados de sombreros de ala.

La fiesta en Villavieja es un tanto más especial para sus cofrades que para el resto de vecinos, como también lo fuera en Yecla, aunque en los últimos años se realiza más abierta al resto de conciudadanos gracias a los actos organizados por el Ayuntamiento.

En Villavieja, a excepción de la misa y la correspondiente procesión, la treintena de hombres que integran la Cofradía tienen sus actos particulares: convite de los mayordomos y comida de hermandad posterior, siempre colaciones decentes, como ordenan sus estatutos del siglo XIX, además de la ´merienda de fardel´ con la que concluyen la jornada.

En Yecla, además de una misa y la procesión, otros actos habituales son el convite ofrecido por el Ayuntamiento y el baile.