Vilvestre celebró el domingo 9 de marzo la diecinueve edicción de la marcha de senderísmo "Arribes del Duero", en la que se congregaron más de mil personas para disfrutar de un explendido día primaveral, con una temperatura idilica que superaba los 22 grados y sobre todo el poder contemplar el manto blanco de los almendros en flor.

Los participante se concentraban junto al "Rollo de la Justicia" para acreditarse y recibir el obsequio conmemorativo que consiste en una nevera isotermica. Algo antes de las 11 de la mañana partía el primer grupo hacia el caño del Sierro, para continuar con los senderos que conducen hasta el molino de "La Luisa", donde los participante pudieron observar el funcionmiento de este molino restaurado, que es movido por la fuerza del agua de un arroyo para moler el grano.

Continuaban hasta el Monte Gudín, donde recibieron el avituallamiento de una naranja y una botella de agua, para realizar un pronunciado descenso por un sendero abrupto en las Arribes del Duero, siguiendo la orilla del río Duero.

Finalmente los participantes llegaban al merendero de "La Barca" donde con una excelente organización se hacía entrega de la comida a base de asados, chorizo, panceta y naranjas de Vilvestre, además de vino de Aldeadávila de la Ribera, café y aguardiente. Además se había instalado una carpa en la que los comensales se refugiaban de los rayos del sol, en un día maravilloso de primavera.

Después de la comida los participantes se trasladaron en microbus hasta el pueblo, donde tuvo lugar una actuación de la "Danza del Paleo" al son de la flauta y tamboril de "Afro".